Antes de ir de vacaciones… ¡vacúnate!
"Venid a descansar a un sitio tranquilo..." ¿Qué es descansar?
Quizá penséis que es una
pregunta tonta... A veces ocurre que a la vuelta de las vacaciones muchos
tienen la impresión de haberlas malgastado tontamente... Y que más que
descansar han vuelto más estresados que cuando fueron...
Por eso pienso, que tan
importante como el destino de vacaciones, las reservas de hotel, las
excursiones, las tarjetas... son las vacunas... He aquí una serie de vacunas
para convertir el tiempo de vacaciones en tiempo de descanso...
Vacuna contra la monotonía. Tanto si vas a la playa, a
la montaña, a la casa del pueblo, como si este año te toca «veranear» donde
normalmente «invernas,» tienes que saber que, si olvidas esta vacuna,
probablemente corras el peligro de hacer lo de todos los veranos, de hartarte
de las mismas cosas y, lo que es peor, a la vuelta de vacaciones, llegar
tostado por la «mala leche.»
Vacuna contra el estrés. Si tú eres de los que se
mueve normalmente al compás de las agujas del reloj, es muy conveniente que no
descuides esta vacuna. Te ayudará a «olvidar» tu apretada agenda, tus
preocupaciones, tu trabajo... Ah, y uno de los síntomas para saber si esta
vacuna está surtiendo el efecto deseado en tu organismo es comprobando si
puedes sobrevivir un día, una semana, un (esto es para nota) mes entero
sin la preocupación del dichoso móvil.
Vacuna contra los nervios desatados. Está indicada, sobremanera,
para las largas colas. En la carretera, en los museos, en los supermercados, en
los chiringuitos... Ante todo no pierdas los nervios y disfruta. Se cuenta que
Jesús en el sermón de la montaña habló de otra bienaventuranza que los
evangelistas la veían poco formal y no la quisieron recoger: «Dichosos los
lentos, porque no se perderán el más mínimo detalle de la vida.»
Vacuna contra «los insectos insoportables.» No me estoy refiriendo a
pulgas, avispas, escarabajos, chinches y demás especies. Me refiero a otro
grupo más común: tus amigos, tu mujer, tus hijos, tu familia..., aquellos con
los que tienes que pasar estas vacaciones... Es el momento de ofrecer tu tiempo
o, lo que es lo mismo, tu vida, a los tuyos, sin las prisas del trabajo y las
obligaciones de cada día.
Vacuna contra el «ya hablaremos.» Son las vacaciones un tiempo
privilegiado para no quedar las conversaciones a medias. Ya no hay excusas:
«Tienes que ir al colegio, se hace tarde...» En la mesa, debes saber, que se
nutren los estómagos, mas en la sobremesa se nutren ¡y de qué manera! los
afectos. Es el tiempo indicado para unir comida con cena sin despegar «el culo»
de la silla... hablando, riéndose, escuchando..., en fin, queriendo y viviendo «a
pierna suelta.»
Vacuna contra el asfalto. Evita en la medida de lo
posible las aglomeraciones, los coches, los bares... Da a tus pulmones un
premio respirando aire fresco y a tus sentidos obséquialos con una bella puesta
de solo un campo sembrado de Vida.
Vacuna contra los mapas de carretera. Esta vacuna te ayudará a
«perderte.» Sí, has leído bien, a perderte en una encrucijada de pequeños
pueblos, en un silencioso pinar o, simplemente, en tu habitación. Y es que a
veces es bueno perderse para encontrarse a uno mismo. . «Vacuna contra la boca
seca.» Este verano da vacaciones a tu lengua y pon a currar (ya era hora, ¿no?)
a tus oídos... Y es que debes saber que Dios nos dio una boca y dos oídos,
precisamente para eso, para escuchar el doble de lo que hablamos.
Vacuna contra «el yo-yo.» No, no se trata del famoso
jueguecito. Tal vez veranear sea conjugar la vida en segunda persona. No donde
yo quiero ir sino donde quieras ir tú; no lo que a mí me agrada, sino lo que te
complazca a ti; no donde, cuando y como yo quiera, sino cuando, donde y como
quieras tú.
Vacuna contra la maleta a medio hacer. Se te pueden olvidar las
bermudas, o la crema protectora o las sandalias, incluso, si me apuras, hasta
el botiquín de primeros auxilios... pero nunca se te puede olvidar a Jesús. Él
también merece unas vacaciones y justamente este año te ha elegido a ti para
pasarlas juntos... ¿Qué dices? Sí, el descanso veraniego puede ser un tiempo
magnífico para revisar nuestra vida, reconocer nuestras equivocaciones,
respetar nuestros límites y aprender a vivir de manera más humana... Es una
forma de escuchar la invitación de Jesús: "Venid a un sitio tranquilo a
descansar".
Os recordamos que el próximo Miércoles 16 de Julio, celebramos la festividad de la Virgen del Carmen, Patrona de las y los CARMELITAS.
FELICES VACACIONES PARA TODOS Y QUE NADIE SE OLVIDE NINGÚN DIA DE
DEJAR DE SOÑAR.
DEJAR DE SOÑAR.